Pequeñines no, gracias
He tardado un poco en decidirme a empezar este blog pero es lo que tenemos las monjas. Aquí en el monasterio vamos a nuestro ritmo. Vale, es una excusa porque con los patines de nuestra orden llegamos raudas a casi todos lados.
Quería comentar una noticia que a muchos les puede parecer simplemente curiosa y a los editores de libros de ciencia muy suculenta económicamente, por lo de las correcciones: es la degradación de Plutón a planeta enano. Lo que me lleva a preguntarme varias cosas:
-¿Qué es esta especie de clasismo cósmico? ¿No iban a integrar más planetas en lugar de denigrar a uno?
-En esta aristocracia del universo, ¿qué clase de científicos, que cambian de opinión más que de chaqueta, deciden si Plutón deja de ser o no planeta? ¿Los que dan una conferencia a nivel mundial con un peluche de Pluto en las manos, por ejemplo?
-¿Sólo lo rebajan a planeta enano porque es pequeño, frío y está lejos de cuerpos celestes más lozanos?
-Y si es un planeta enano, ¿no sigue siendo planeta, aunque enano?
De todo esto, con mi ignorancia y mi fe a cuestas, deduzco:
-Que la comunidad astronómica quería hacer un circo mediático sea como sea ("¡eh,estamos aquí! No somos futbolistas pero tenemos el poder de hacer del firmamento lo que queramos, MUAJAJAJAJA")
-Que el rollo "es un planeta, ahora no" es digno de cualquier programa rosa de madrugada de fin de semana carente de la seriedad necesaria de una comunidad científica
-Que Plutón será lo que todos los que vivimos bajo el cielo queramos que sea, que para eso el cielo es de todos y no sólo de los astrónomos con ansia de protagonismo
Y éste ha sido mi mini-esquema de razonamiento. Maestros de la retórica, ya pueden venir a linchar a esta pobre monja. Ah, y lo de la foto no es una bola de discoteca, Dios me libre. Es el planeta Plutón. Planetaplanetaplanetaplaneta.
Ups.